Ciclofosfamida (Cytoxan)
La ciclofosfamida es un medicamento que actúa inhibiendo el sistema inmunitario. Es una opción de tratamiento importante para las enfermedades autoinmunes graves.
La ciclofosfamida se puede usar para tratar varios tipos diferentes de enfermedades reumáticas, como el lupus eritematoso sistémico (LES), las enfermedades que inflaman las paredes de los vasos sanguíneos (formas de vasculitis) y, a veces, la artritis reumatoide.
La ciclofosfamida es más conocida por su otro uso como fármaco de quimioterapia que se usa para tratar ciertos tipos de cáncer.
Tomar ciclofosfamida
La ciclofosfamida está disponible en dos formas: comprimidos de 50 mg e infusión intravenosa.
Los comprimidos de ciclofosfamida se toman una vez al día, mientras que las infusiones intravenosas se administran cada 2-4 semanas.
La dosis de ciclofosfamida se basa en el peso corporal.
La dosis inicial habitual de los comprimidos es de 1,5 a 3 de ellos, de 50 mg cada uno, al día, para una dosis diaria total de 75 a 150 mg.
La dosis de ciclofosfamida intravenosa suele oscilar entre 500 y 1500 mg por perfusión, y la dosis exacta la decide el médico que lo prescribe.
La ciclofosfamida tarda de 6 a 12 semanas en empezar a hacer efecto. Es importante que los pacientes que comienzan a tomar este medicamento sigan tomándolo según lo prescrito.
Tomar tabletas de ciclofosfamida con alimentos puede ayudar a reducir el malestar estomacal.
Pruebas y riesgos importantes
Los pacientes que toman ciclofosfamida deben hacerse análisis de sangre y orina con regularidad (por lo general, cada dos semanas o cada mes) para asegurarse de que el medicamento no afecta los recuentos sanguíneos ni daña la vejiga. Los pacientes que reciben ciclofosfamida por infusión intravenosa deben recibir un cronograma personalizado de análisis de sangre por parte de su médico.
Se recomienda a los pacientes que toman ciclofosfamida que beban mucha agua (de 8 a 10 vasos al día) para ayudar a reducir el riesgo de efectos secundarios en la vejiga.
La ciclofosfamida puede hacer que a las personas les resulte un poco más difícil combatir las infecciones.
Los pacientes que toman este medicamento deben llamar a su médico si tienen fiebre, creen que tienen una infección o se les han recetado antibióticos para tratar una infección.
Los pacientes deben coordinarse con su médico para interrumpir el tratamiento antes de cualquier cirugía. Se puede volver a iniciar una vez que las cosas se hayan curado y no haya señales de infección.
Los pacientes deben consultar todas las vacunas con su médico, ya que no se recomienda administrarlas mientras estén tomando ciclofosfamida.
La ciclofosfamida puede dañar al feto. Las pacientes que puedan tener relaciones sexuales y quedar embarazadas deben usar un método anticonceptivo confiable.
Ciencia
La ciclofosfamida es un agente alquilante que impide que una variedad de tipos diferentes de células se dividan o hagan copias de sí mismas.
Los agentes alquilantes, como la ciclofosfamida, actúan uniéndose a partes del ADN dentro de las células. Esto interfiere con la capacidad del ADN para replicarse y, a su vez, evita que las células se dividan. Las células pueden morir y, cuando lo hacen, no hay copias más jóvenes que las reemplacen.
El efecto de la ciclofosfamida es útil para tratar algunos tipos de cáncer en los que las células tumorales se dividen sin control.
La ciclofosfamida también es muy buena para evitar que algunos tipos de células del sistema inmunitario (glóbulos blancos) se multipliquen y este efecto es lo que la hace útil para tratar las enfermedades reumáticas.
En los pacientes con enfermedad reumática, el sistema inmunitario ataca al cuerpo por error. La ciclofosfamida suaviza este ataque al impedir que las células del sistema inmunitario se repliquen y produzcan más por sí mismas.
Si bien la supresión del sistema inmunitario puede dificultar que los pacientes luchen contra las infecciones, también ayuda a estabilizar el sistema inmunitario si es hiperactivo.
Seguridad
La ciclofosfamida es un medicamento poderoso que requiere análisis regulares de sangre y orina para detectar efectos secundarios más graves.
Los efectos secundarios MÁS COMUNES incluyen:
- Náuseas, vómitos, dolor abdominal y diarrea
- Llagas en la boca
- Erupciones cutáneas
Los efectos secundarios poco frecuentes incluyen:
- Caída del cabello: algunos pacientes pierden el cabello cuando toman ciclofosfamida. Esto es más común con dosis más altas y vuelve a crecer cuando se deja de tomar.
- Conteos sanguíneos: la ciclofosfamida puede provocar una disminución en la cantidad de glóbulos rojos (que transportan oxígeno), glóbulos blancos (que son necesarios para combatir las infecciones) y plaquetas (que ayudan a detener el sangrado). Los recuentos sanguíneos se controlan de cerca y los cambios suelen ser reversibles cuando se suspende el medicamento.
- Infección: cualquier infección o fiebre debe tomarse en serio y ser revisada por un médico.
- Vejiga: la ciclofosfamida puede irritar la vejiga, lo que puede causar dolor y sangrado. Para reducir el riesgo de que esto suceda, es importante beber de 8 a 10 vasos de agua al día. Los pacientes que noten sangre en la orina deben informar inmediatamente a su médico.
- Fertilidad: la ciclofosfamida puede afectar la fertilidad tanto en hombres como en mujeres. El efecto puede ser reversible cuando se suspende el medicamento. Las pacientes que puedan estar planificando un embarazo en el futuro deben hablar de ello con mucho cuidado con su médico.
- Neoplasia maligna: cuando se usa durante períodos prolongados, la ciclofosfamida puede asociarse con un pequeño aumento del riesgo de linfoma y cáncer de vejiga y piel.
Cómo minimizar los efectos secundarios de la ciclofosfamida:
- Los pacientes deben tomar la ciclofosfamida según lo prescrito y hacerse análisis de sangre y orina con regularidad.
- Los pacientes deben asistir a todas las citas médicas
- Beba de 8 a 10 vasos de agua al día para reducir el riesgo de irritación de la vejiga
- Tome cualquier antibiótico que se le pueda recetar junto con la ciclofosfamida
Los pacientes deben consultar a su médico si están preocupados por cualquier efecto secundario.
Para detener la ciclofosfamida, los pacientes suelen ser destetados lentamente. Las enfermedades reumáticas pueden «exacerbarse» después de dejar de tomar este medicamento, especialmente si se suspende repentinamente.
La ciclofosfamida puede provocar defectos de nacimiento y provocar un aborto espontáneo. Las pacientes deben evitar el embarazo y la lactancia mientras estén tomando este medicamento, y se les recomienda utilizar un método anticonceptivo fiable.
Los pacientes que NO deben tomar ciclofosfamida incluyen:
- Pacientes que han tenido una reacción previa a la ciclofosfamida
- Mujeres que están embarazadas, que planean quedar embarazadas o que están amamantando
- Hombres que planean un embarazo con su pareja
- Algunos pacientes con enfermedades del hígado, los riñones o trastornos de la sangre
- Pacientes con infecciones activas
- Posiblemente pacientes con antecedentes de cáncer
Las pacientes que queden embarazadas mientras están tomando ciclofosfamida deben notificarlo a su médico inmediatamente.
Embarazo y medicamentosLos pacientes deben llamar a su médico si se sienten enfermos y quieren dejar de hacerlo, o si están preocupados por cualquier efecto secundario.
Otros motivos para llamar a un médico mientras tomas ciclofosfamida son los siguientes:
- Náuseas o diarrea
- Fiebre o posible infección
- Quedar embarazada o planificar un embarazo
- Sangre en la orina o dolor al orinar
- Antes de cualquier cirugía